Inauguran en el MUA sala temporal sobre desarrollo histórico de la cerámica

La exposición muestra la manera en que poblaciones como Santo Domingo de Guzmán, Guatajiagua y Quezaltepeque desarrollaron la cerámica y qué influyó en ellos para lograr que se conservara su elaboración hasta los tiempos actuales.

Fernando Quintanilla
Fotos: Alexander Morales
La Palabra Universitaria

Formas persistentes en la cerámica: un recorrido en el tiempo es el nombre de la más reciente exposición temporal inaugurada en el Museo Universitario de Antropología (MUA), de la Universidad Tecnológica de El Salvador (Utec).

El acto de inauguración y corte de la cinta fue presidido por el vicepresidente de la Utec, Reynaldo López Nuila; el viceministro de Educación, Ciencia y Tecnología, Ricardo Cardona; y el director de Cultura de la Utec, Ramón Rivas.

La exhibición muestra las características esenciales de la cerámica prehispánica de El Salvador, principalmente la que se desarrolló en pueblos originarios como Santo Domingo de Guzmán, Quezaltepeque y Guatajiagua, mismas que se han convertido en referentes de la cerámica hasta hoy conocida en el país.

“Para poder mostrar la belleza y las formas de la cerámica de estas poblaciones, nuestro museo ha montado esta exposición donde podrán apreciar el desarrollo que tuvo el barro desde el periodo preclásico, el cual comprende desde los años 2500 antes de Cristo hasta los años 2000 de nuestra era”, ha descrito Rivas.

Apunta que la muestra permite conocer los usos y valor que la gente le dio a la cerámica, no solo para guardar sus cosechas y preparar alimentos, sino también en el uso religioso, convirtiéndose en parte de la cultura tradicional y que, en los tiempos actuales, sigue vigente como productos de mercado y forma de ganarse la vida, sin desmerecer su aporte a la cultural actual.

Rivas resalta que, desde la perspectiva cultural, la cerámica ayuda a entender las costumbres de los pueblos que la produjeron; es un indicador que permite inferir el avance que tuvieron las personas luego de hacer uso del fuego, tanto en sus hogares como en sus grupos, dígase, tribus, clanes o simplemente pueblos.

“Para los antropólogos y otras disciplinas de la ciencia, conocer y analizar la cerámica es de mucha importancia, ya que la maestría de sus creadores se ve reflejada tanto en las diversas técnicas utilizadas para su elaboración como en su decoración”, dice.

Al mismo tiempo el funcionario cultural de la Utec hace un llamado para detenerse un poco en el tiempo y conocer sobre cómo poblaciones salvadoreñas, como Santo Domingo de Guzmán, Guatajiagua y Quezaltepeque, desarrollaron la cerámica y qué influyó en ellos para lograr que se conservara su elaboración hasta nuestros días.

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