Marilú Marcillo, de Saint Peter´s Univercity, dijo durante una conferencia magistral que impartió en la Utec, que la igualdad de género no solo es un derecho humano fundamental, sino una base necesaria para un mundo pacífico, próspero y sostenible.
Guadalupe Ramírez
Fotos: Oscar Sosa
La Palabra Universitaria
Exponer las razones del porqué de la importancia del empoderamiento de la mujer en la sociedad, fue el principal motivo por el cual la catedrática de Saint Peter´s Univercity, de la ciudad de New Jersey, Estados Unidos, Marilú Marcillo Calderón, se dirigió a un grupo de estudiantes de la Universidad Tecnológica de El Salvador (UTEC).
Para Marcillo, quien se encuentra en El Salvador para realizar una investigación sobre el proyecto de gobierno Ciudad Mujer, el lugar que ocupa actualmente la mujer en los diferentes países latinoamericanos y norteamericanos es marginado al igual que los indígenas en la sociedad.
Reconoce que la educación es un área crítica de empoderamiento para las mujeres y resalta que no es un lujo, pues también la Organización de las Naciones Unidas (ONU) lo afirma, ya que es uno de los ejemplos más claros de discriminación que sufren las mujeres.
“La educción no es un lujo, pero en muchos países del tercer mundo así lo consideran para la mujer, donde realmente no debería ser así, es algo que debe ser para todos por igualdad”, afirmó.
Así mismo destacó que la razón por la que deberían empoderar a una mujer empieza desde la igual de género como una idea que tiene que ser clara para todos en la búsqueda de un cambio en la sociedad.
“La igualdad de género no es solo un derecho humano fundamental, sino una base necesaria para un mundo pacífico, próspero y sostenible”, destacó ante los estudiantes de la Utec.
Del mismo modo habló sobre el interés que tiene en trabajar y aprender de las mujeres empresarias y vio la oportunidad en Ciudad Mujer, un programa que lleva casi 7 años ayudando a más de un millón de mujeres salvadoreñas y que les ha permitido poder ser emprendedoras en su propia empresa.
Dijo que ese proyecto lo ve como un beneficio ya que como bien lo explicó, no son las empresas grandes las que crean trabajos sino las compañías pequeñas que son las que ayudan a movilizar la economía de cualquier país.
También se refirió al empoderamiento económico de las mujeres como estimulante al crecimiento de la economía de un país y una ayuda para reducir los niveles de pobreza que se viven en la actualidad.
Concluyó que a pesar de la situación del empoderamiento de la mujer las vidas de millones de ellas se ven eclipsadas con la discriminación, falta de poder, el no acceso a la justicia y la pobreza.
